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MEJOR NINGUNA PROPUESTA
David Bacon, Pacific News Service
SAN FRANCISCO, California, 25 de mayo, 2006.

El senado de Estados Unidos aprobó hoy una versión de "reforma migratoria comprehensiva." Senadores demócratas y republicanos se felicitan de haber aprobado una propuesta de ley después de muchas discusiones, la cual tiene debilidades, aceptan, pero creen que es mejor que no sacar ley alguna. Sin embargo, ajenos a estos congresistas y sus lobbyists (cabilderos), representantes de grupos comunitarios dicen lo contrario: mejor hubiera sido no aprobar ley alguna que aceptar esta mezcla de mil enmiendas, la S 2611, que ahora deberá ser negociada con la propuesta de ley aprobada en diciembre de 2005 por la cámara de diputados, la punitiva HR 3347 que tantas marchas provocó en todo el país.

En un comunicado, la Red Nacional por los Derechos de Inmigrantes y Refugiados (NNIRR) condena la propuesta del senado. "La prisa por crear un acuerdo bipartidista ha producido una ley que de aprobarse provocará profundas divisiones en la comunidad de inmigrantes y condenará a millones de indocumentados a permanecer en la oscuridad," afirma la Red.

Sheila Chung, vocero de la Coalición por los Derechos de los Inmigrantes de San Francisco, expresó que "la propuesta del senado no refleja la reforma migratoria demandada por millones de inmigrantes que marcharon en las calles."

Más de 12 millones de indocumentados viven en los Estados Unidos, sujetos a deportación en cualquier momento y vulnerables a la sobre explotación en el trabajo. Para grupos de defensa de los inmigrantes, la ley de senado hará las cosas aún peores. La ley incluye los puntos siguientes.

La Enmienda S 2611, Hagel/Martinez, pide que los indocumentados con menos de dos años en EUA sean deportados de inmediato (unas dos millones de personas). Aquellos entre dos y cinco años tendrían que salir de EUA para solicitar su reingreso a través de un mecanismo cuyo funcionamiento se desconoce. La capacidad de las oficinas de inmigración en la frontera para procesar las nuevas solicitudes de este grupo (unas 3 o 4 millones de personas) parece muy cuestionable cuando, en la actualidad, ya se tardan muchos años en procesar solicitudes de residencia.

La Enmienda S 2611, a igual que la HR 4437, aprieta las leyes contra compañías que contraten indocumentados. Actualmente es un crimen trabajar sin papeles; esta ley es usada con frecuencia por los patrones para castigar aquellos trabajadores o trabajadoras que luchan por mejoras laborales o por formar un sindicato. Con la nueva ley de inmigración, el Departamento de Seguro Social (que regula prestaciones sociales como seguro de desempleo y seguro de retiro) se convertiría en policía de inmigración obligando a todos los y las trabajadoras a portar una nueva credencial y a los patrones a despedir aquellos cuya credencial sea cuestionada. Actualmente ya existe un plan piloto llamado Basic Pilot Program que camina en esta dirección y que ha mostrado montones de errores en la implementación de tal programa.

La enmienda del senado amplía el programa de trabajadores temporales que ya existe y crea uno nuevo, el cual deja que los patrones contraten empleados fuera de EUA mediante visas temporales. Los nuevos trabajadores estarán sujetos al patrón, pues su estancia legal en EUA dependerá de su permanencia en el trabajo. Ana Avendaño, vocera de la federación sindical AFL-CIO afirma: "Este plan transformará empleos permanentes y con prestaciones en empleos eventuales y sin prestaciones. Básicamente esto desempleará a millones de trabajadores protegidos por programas de bienestar social ganados hace varias décadas." Avendaño explica que si los y las indocumentadas recibieran visas permanentes en lugar de visas temporales entonces podrían ejercer sus derechos como trabajadores y como residentes de una comunidad.

La enmienda S 2611 "incrementa en mucho las detenciones, deportaciones y la militarización de la frontera," según la organización Fondo para la Educación y Defensa Legal de los Asiático Americanos (AALDEF). De hecho, la corporación Halliburton ya ha recibido un contrato para construir centros de detención masiva cerca de la frontera con México. Mientras, otros piden abrir de nuevo bases militares clausuradas para que sirvan de cárcel para detenidos e inmigrantes. La ley del senado criminaliza el uso de documentos falsos; esto podría resultar en el arresto de millones de indocumentados que hoy usan tarjetas falsas del seguro social para conseguir empleo.

Stan Mark, director de AALDEF, advierte que "el levantamiento del movimiento de masas redefinirá el debate electoral si el congreso aprueba la llamada reforma migratoria comprehensiva negociada." Más bien, dice Mark necesitamos la eliminación de las leyes actuales que penalizan a los indocumentados y en especial las sanciones contra las compañías. "El clima político del debate ha convertido esta ley migratoria en el Caballo de Troya de legisladores antiemigrantes y políticas antidemocráticas."

La redes NNIRR, AALDEF y otras que no cabildean en Washington exigen alternativas positivas y pro emigrantes. Sus propuestas incluyen legalizar de inmediato a los indocumentados, permitir la reunificar de familias, eliminar las largas listas de espera para obtener una visa, congelar el programa de trabajadores temporales, prohibir la detención indefinida de inmigrantes y terminar la militarización de la frontera con México.

Dado que el senado ha aprobado una ley muy alejada de estos principios mientras que la cámara de diputados ha aprobado otra propuesta aún más desfavorable para los inmigrantes, los grupos en apoyo a los indocumentados piensan que detener la aprobación de cualquier ley es ahora su única opción.

De hecho, este podría ser el desenlace de los intentos legislativos de conciliar la ley de los senadores con la de los diputados. Los congresistas más conservadores se niegan a avalar un plan que implique cualquier nivel de legalización para los indocumentados. "Es posible que una conciliación entre la HR 4437 y la S 2611 no pueda suceder," piensa Evelyn Sanchez, vocera del grupo Lucha por la Libertad de Trabajadores Indocumentados. "Si esto sucede, tendremos más tiempo para demandar una ley que realmente sea justa y comprehensiva. Pero si la HR 4437 y la S 2611 logran negociarse en una nueva ley que el presidente firme, entonces nuestra tarea será revocar esa ley."

Tal escenario no es muy agradable, pero los activistas pro inmigrantes no se rinden. "Ya antes ha sido posible," dice Sanchez.

(Versión en español: Enrique Dávalos)

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